La Caleta, Cádiz, 21 de diciembre 2003
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Como pez en el mar...
mi yo en fotos
Declaración de im-principios
Demasiado perezosa para escribir cartas,
demasiada prisa para bucear en mi interior,
demasiados sinsentidos por entender...
Por eso, y porque olvidé escribir con pluma y casi en ordenador, nació "en busca del mar": el apéndice más personal de esta periodista que habla hasta debajo del agua...
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4 comentarios:
Esta es una de esas fotos donde me pierdo...
Cuando estoy agobiada la convierto en el fondo de pantalla del ordenador, y de repente... si la miro fijamente, estoy allí: en la Caleta (sí la misma playa desde la que salía del agua Halle Berry en 007), tal día como hoy hace tres años, disfrutando de una luz de invierno que sólo he visto allí.
Si Halle Berry ve esta playa hace, más o menos, treinta años, no mete un pie allí ni jarta vino.
- ¡Que ai don nou, quillo, que ai no me metiesion ahí, questá mu negro.
El aspecto de la caleta era sucio, y la basura llegaba a amontonarse en los pilares del balneario durante la bajamar. Eso sí: ni jarto vino cambio el sabor de La Caleta de entonces por el de ahora (morriña, nada más). Esas mujeres haciendo punto en bañador y zapatillas de paño; esos quillos juegando ar júmbol y er balón dereshito a la tortilla de papas.
Ahora, muy cerca de allí, hay una estatua dedicada a un amigo con quien paseé por Cádiz muchas veces. Si lo ve, no se lo cree; aunque, desgraciadamente, no lo verá. Él, que se hacía Cádiz Madrid y viceversa montado en su cuatro latas de poeta, con unas gafas llenitas de dioptrías, y que me decía: "Tú sabrás, pero de verdad que no entiendo por qué no quieres venir conmigo a Madrid, si da gloria verme conducir". Él, a quien no le gustaban estatuas ni homenajes... En fin: Era tan corto de vista y tan grande de corazón, que habría ignorado la suya.
Un beso, Faramar. Espero que durante estas vacaciones nadie perdamos las gafas que nos conducen hacia la realidad; la realidad íntima, y la de cada quien.
Me parece estar viendo una especie de Shangri-la al lado del mar. Preciosa la imagen -y por lo tanto la mirada.
Un abrazo desde Barcelona.
Le Mosquito: me encanta que hayas ilustrado la fotografía con una historia tan personal... preciosa, por cierto.
Cuando vuelva a Cádiz (dentro de tres días) si voy a la Caleta, la miraré con otros ojos ;-).
Toni.B: Gracias por tu comentario... lo cierto es que para mí es un trocito de paraíso donde no me importaría perderme unos días al año.
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