miércoles, 11 de octubre de 2006

SOY UNA VOYEUR

Cuando pasé por la facultad de periodismo, uno de los primeros axiomas que oí es que para ser periodista es necesario ser curioso por todo y pensé: “si es sólo por esto, ya tengo veinte créditos antes de empezar”.
Cuando rellené el apartado de mis intereses en el perfil de este blog, escribí: “la realidad externa e interna”. Tanto lo que nos ocurre y conmueve por dentro, como lo que hace que el mundo se mueva, para bien; como el descubrimiento de vacunas contra enfermedades, o para mal; como experimentos con bombas nucleares.
Sea como sea, siempre he sido una persona curiosa y al reflexionar sobre mi “actual falta de tiempo”, me he dado cuenta que he pasado de curiosa a voyeur, que se relaja visitando blogs ajenos. La mayoría de las veces de gente amiga, pero hay veces, que una curiosidad imperiosa me arrastra hasta blogs de otras personas que no conozco y que me muestran abiertamente sus vidas, su manera de pensar, sus desavíos, sus ideas políticas, su poesía, e incluso sus polvos (esto último me dejó pasmada). Y es gracias a los blogs, que me acerco a vidas que nunca viviré, países que no conoceré e incluso, ojearé álbumes familiares de gente a la que jamás saludaré.
El otro día visitaba el blog de F.A. que nos planteaba las diferencias entre blog y diario. Esto me hizo pensar en que a lo largo de mi vida, nunca he tenido un diario que durase más que la cura de un desamor y sin embargo, este blog que nació sin rumbo, ya tiene medio año. En este tiempo no he sacado jamás las miserias que sacaría en un diario, no he escrito cartas de amor, no he pegado las patadas que daría a una puerta “mental” en los días grises, llenos de contrariedades, y sin embargo algo más sabéis de mi. Por el contrario, paseo por blogs ajenos donde la gente habla explícitamente de su intimidad, y siento pudor.
¿No nos hace eso más vulnerables?
En estos últimos meses, habéis navegado en mi mar, sólo sobre las aguas que yo he querido mostrar y que sigáis después del tiempo, os convierte en diestros marineros, aunque os he librado de tempestades y he dejado para mí, cosas que sólo deben estar en la profundidad del mar. Justo al lado de los restos del Titanic.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

¿quien dice qué es la intimidad? Para unos que le vean desnudo no significa nada, para otros contar lo que le pasa, hay quien muestra sus polvos y hay quien no soporta que le vean comer en público. Y a cada uno de ellos le parecerá sorprendente que los otros se atrevan a escribir ciertas cosas en sus blogs.

Anónimo dijo...

aPOSTaría un post a que esas intimidades que observas han caído en tu navegador gracias al blogroll de martilloepistolar -por ejemplo-

Rapajic dijo...

por eso precisamente este blog está durando más tiempo que aquellos diarios, porque es más sano que ellos (aunque yo siempre he maldicho los diarios y no soy muy objetivo a la hora de ser benevolente con sus efectos en quienes los escriben o escribieron). y que sepas que este mar está bonito así y que si alguna vez alguna tempestad lo gobernara tan sólo pasaría que... tras la tempestad siempre llega (de nuevo) la calma.
muchas gracias por "enlazarme", me ha hecho mucha ilusión.

Anónimo dijo...

A mí me has hecho un feo.
Despues de pagar dinero por conectarme a intenet en un ciber(eso para mí es delito) y poder comentar en vuestros respectivos, me encuentro con que no has escrito nada.
Mal vamos. Con la de temas que dá una vivienda nueva.

MAREAS

LILANINE. Get yours at bighugelabs.com/flickr