sábado, 30 de diciembre de 2006

PERIODISMO: UNA DE ARENA

Al narrar los hitos que me han impresionado en mi vida laboral, he recordado la famosa historia del cineasta Orson Welles y su particular adaptación de la novela "La Guerra de los Mundos".
En 1938 este cineasta estadounidense tenía un popular programa en la radio que consistía en adaptar obras de teatro y literatura a ese medio. El 30 de octubre de ese año Welles transmitió una adaptación de La guerra de los mundos. Al principio de la transmisión un locutor indicó que empezaba el programa y cedió la palabra a Welles. Entonces éste empezó sin más a recitar las primeras líneas de la novela de Herbert George Wells, en tono dramático. La adaptación que hizo Welles no era una simple lectura del texto de su casi homónimo Wells. La historia estaba disfrazada de programa musical interrumpido por informes noticiosos de que unos astrónomos acababan de ver unas extrañas explosiones en Marte. Luego un reportero entrevistaba a un astrónomo, que decía que no podía explicar qué estaba pasando. Al rato se veía caer del cielo un meteorito en Nueva Jersey. Después resultaba que era un objeto cilíndrico descomunal. Se reunía mucha gente para verlo hasta que el aparato se abría y del interior salían unas criaturas monstruosas. Se oían gritos, el reportero vociferaba. La atmósfera de la transmisión era de un realismo total. Los que no oyeron el principio del programa pensaron que un ejército marciano estaba invadiendo el mundo.
El programa de Orson Welles produjo histeria en masa. Hubo quien se encerró en el sótano de la casa con pistolas. Otros se pusieron toallas mojadas en la cara para protegerse del gas venenoso de los marcianos. El programa fue motivo de escándalo e indignación cuando se reveló la realidad. También demostró el poder de una narración bien hecha. Fue uno de los momentos más gloriosos (y terribles) de la historia de la radio.
Se puede escuchar el famoso programa de Orson Welles (en inglés) en internet en esta dirección: http://www.earthstation1.com/WOTW/War_of_the_Worlds.ram
El pasado 28 de diciembre, día de los inocentes, muy lejos de querer imitar al director de "Ciudadano Kane", se nos ocurrió esto:
Durante la entrevista el teléfono del estudio no dejó de sonar, y mientras los oyentes nos decían eso de: "no es cierto, ¿verdad? es una broma"; "mira que es el día de los inocentes"..., hubo compañeros que intentaron comunicarse con la Guardia Civil e incluso con el inexistente centro de naturaleza. Pasamos un día divertido y luego, tras desmentirlo, nos reímos todos.
Conclusión: no hay que fiarse de todo lo que venden los medios de comunicación, que ésto era una broma, pero hay quien gusta y abusa de noticias alarmistas.

PERIODISMO: UNA DE CAL

Hoy las redacciones de toda España lo están pasando canutas debatiendo con qué abrir los informativos: ¿muerte de Sadam Hussein? ¿Atentado en Barajas? En este caso, termina ganando el factor proximidad a pesar de que los heridos son pocos, leves y “sólo” a estas horas hay un desaparecido. Y digo sólo, porque el número de heridos, su gravedad y las muertes suelen pesar a la hora de organizar tanto una noticia, como su orden de aparición en un informativo.
Llega un momento en la vida en que la pregunta “¿Dónde estabas tú cuando…?” cobra sentido y aparece más a menudo de lo que nos gustaría (en algunos casos).
Con la muerte de Hussein, la televisión nos recuerda la Guerra del Golfo y la operación “Tormenta del desierto”: yo tenía 11 años, era verano y hacía un calor abrasador en el pueblo de mi infancia. ¿Y tú dónde estabas? ¿Cuántas veces has recordado lo que hacías a las tres de la tarde de un 11 de septiembre de 2001? Un impactado Matías Prats retransmitía cómo dos aviones chocaban contra las Torres Gemelas. Seguro que no lo has olvidado, como tampoco has olvidado el atentado de Atocha del 11 M. En este caso, yo no olvido la manifestación del 12 de marzo, apostada en una marquesina de la estación de Atocha, a los pies del Ministerio de Agricultura, retransmitiendo con los compañeros la desazón de esa triste tarde de lluviosa primavera.
Este año que está a punto de finalizar se ha celebrado el 50 aniversario de televisión española, y es curioso como en uno de sus últimos especiales, las caras conocidas del telediario recordaban de su trayectoria profesional, sobre todo los momentos en los que tuvieron que ser canal de catástrofes naturales, atentados, secuestros…Y es que por desgracia, parece que hay hechos inolvidables, imborrables de la memoria, de la retina o del tímpano.
Hoy, mientras escuchaba los testimonios del atentado terrorista en la T-4, recordé uno de los momentos que más me ha, irónicamente, impactado: el asesinado de un Guardia Civil, casi a la entrada de mi urbanización. Al parecer, como luego nos enteramos, perdía la vida al dar el alto a un coche donde viajaban dos terroristas camino de Madrid, con 50 kilos de explosivos en el maletero.
Cuando trabajas en un medio de comunicación desarrollas el “efecto muelle”: en cuanto oyes unas sirenas, pegas un salto y miras por la ventana para ver de qué se trata.
La tarde del 17 de diciembre salía de mi urbanización y entré sin querer en medio de la noticia: guardia civil, policía, ambulancias, gente agolpada a la valla que separa la vía de servicio de la autopista, caras serias, blancas,… y la policía impidiendo la salida o marcha atrás de mi coche. En aquel momento no sabía qué pasaba, pero sabía que era importante así que llame al trabajo. Poco después llegó el alcalde, concejales… la cosa se ponía cada vez más seria, y fue entonces cuando al poner la oreja me enteré que habían matado a un joven Guardia Civil, que era de Melilla, y que yo… conocía.
Poco a poco fueron llegando compañeros de la prensa y nos colocaron a todos en una gasolinera muy cerca de donde todavía permanecía el coche de los terroristas. Recuerdo que llovía mucho, que todos estábamos muy nerviosos, recuerdo un grito de “¡Al suelo!” como en las películas, un silencio y a continuación una pequeña explosión, seguida de otra ensordecedora, que nos dejó a todos con atontados mientras los cascotes llovían del cielo y las ventanas de la gasolinera reventaban. Tras la confusión, buscarnos unos a otros. Los teléfonos no funcionaban, y desde la emisora de Madrid desesperaban al no poder contactar con nosotros para grabar una crónica.
Pocas veces he contado esta historia, pero hoy al escuchar la noticia del aeropuerto de Madrid, me ha venido a la mente el sonido de la explosión, la imagen del coche saltando por los aires y dejando tras de sí una columna de humo, y la triste historia del joven Guardia Civil Molina, que perdió la vida poco antes de la Navidad de 2002.

jueves, 28 de diciembre de 2006

YO ELIJO

Yo elijo trabajar en algo que me gusta, me apasiona y que después de diez años me sigue motivando aunque esté mal remunerado.
Yo elijo tener mala memoria, para no ser rencorosa y seguir manteniendo esa relación amor-odio que genera la profesión.
Yo elijo trabajar horas extras no remuneradas, porque el trabajo acabado y bien hecho me genera satisfacción.
Yo elijo ir a trabajar con gripe, aunque mi voz esté nublada y mi cabeza embotada, para no perjudicar a algún compañero.


Pero lo que no elijo (ya que nadie me ha preguntado) es ser hacienda, por mucho que digan que "hacienda somos todos".

viernes, 22 de diciembre de 2006

UNA TARDE DE VIERNES... COMO HOY P.EJ

Es la primera tarde de viernes libre en tres meses, así que decido hacer las últimas compras de Navidad.
Voy a IKEA “power” y compro un "necesitado" edredón. El frío ya ha llegado a la Sierra y con siete mantas, ni se pierde el frío, ni se puede mover uno con libertad. Bueno, quizás los ojos sí, pero sólo los ojos. Sólo voy a por un edredón y acabo comprando Reyes: 80 €.
Salgo del centro comercial y recuerdo que tengo que pasar la ITV, y que como esta noche he quedado para cenar y no quiero madrugar, aprovecho mi tarde libre. ITV: 47 €
Suspendo: Tengo que cambiar las ruedas delanteras y mirar el paralelo.
Corro al taller antes de que cierren, porque mañana, repito, no quiero madrugar: dos ruedas: 220 €. Equilibrado y paralelo: 40 €
Recuerdo que en enero me pasan el seguro del coche: 820 € ¡Dios mío! este año me lo han subido. ¡Malditos arreglos de chapa!

Conclusión: no tenía que haber salido esta tarde de casa.
Adiós paga extra (y más), bienvenido transporte público.

jueves, 21 de diciembre de 2006

9 DIAS

La Caleta, Cádiz, 21 de diciembre 2003

miércoles, 20 de diciembre de 2006

TIM BURTON Y THE KILLERS ¿IMPOSIBLE?

El director de cine Tim Burton no nos abandona esta Navidad, y aunque este año no tendremos ni pesadillas, ni novia cadáver, no renuncia a sus huesudos y presta su talento y creatividad a The Killers.
Hablo de una de las bandas de rock de moda en los últimos dos años, nominada a los Grammie, y que ya ha sido galardonada con un MTV Europe Music Awards, en la categoría de mejor grupo de rock.
Burtom dirige el videoclip “Bones”, segundo single de los de Las Vegas: un medio tiempo blandito que encontramos en su último disco “Sam´s Town”.

HAIR

Llevo varios días intentado buscar un hueco para compartir con vosotros una gran alegría. La alegría de encontrar tras años de búsqueda el musical de los años 60 “Hair”, llevado al cine por Milos Forman en 1979.
Parece que cuando algo resulta difícil de conseguir se hace más deseado, suele pasar con las ediciones limitadas, las antigüedades, los discos de vinilo o los amores imposibles.
No sé si “Hair” es el mejor musical de los setenta, muchos incluso no lo conocerán porque quedó eclipsado por otro de los grandes “Jesucristo Superstar”, pero para mí fue un auténtico descubrimiento cuando lo vi por primera vez, en cinta BETA, hace diez años.
Tras buscarlo incansablemente durante mucho tiempo en FNAC, El Corte Inglés, el extinguido Madrid Rock o mítica tienda “La Metralleta” de Madrid, donde con algo de paciencia puedes encontrar auténticos tesoros, entre bazofias y polvo, alguien decidió por mí traspasar la legalidad y abusar de la generosidad de otros cibernautas.
El mismo día que botaba de alegría por haber encontrado “HAIR”, lo grité dos veces, porque por la tarde, paseando por FNAC (donde me habían asegurado que la película estaba descatalogada), sentí que alguien me miraba, que digo me miraba…, me llamaba a gritos. Era Berger, uno de los protagonistas que desde la portada del DVD, original, y por sólo 5,95 €, gritaba mi nombre.
Esa misma tarde volví a ver la película, con el típico miedo de que algo que deseas mucho y consigues, te decepcione. Por el contrario, de nuevo la disfruté, canté las canciones y tuve un poco, “momentos de Peter”.
“HAIR”, una divertida película de final inesperado, contextualizada en los años 60, guerra de Vietnam, EEUU, con gran calidad musical y dirigida por el ecléctico Milos Forman, quién es también padre de otros títulos como “Alguien voló sobre el nido del cuco”, “Amadeus”, “Valmont”, “Man on the moon” o más recientemente “Los Fantasmas de Goya”.

martes, 19 de diciembre de 2006

miércoles, 13 de diciembre de 2006

¿QUÉ POR QUÉ SOY FARAMAR?

- No sé, pregúntaselo a Julio Medem.
Él es culpable de este romántico seudónimo o moderno nick, como quieras llamarlo... Medem, y que mi nombre y apellidos estaban registrados de mil maneras el día que quise entrar en un foro por primera vez. Era el año que el director donostiarra presentaba su película “Lucía y el Sexo”: Mar, mucho mar… sexo también, pero mucho mar, mar, una luz cegadora y la intrahistoria de un faro: faro, faro, farero, faro+mar… ¡Faramar!, ¡sí! raro, pero me gusta.

A veces me he escondido en otros nicks: he sido Ladyblue como una canción de Bunbury en "Flamingos", o Leela (lila), como la protagonista monocular de la serie Futurama debido a mi visión de cíclope, pero siempre - por favor, tono publicitario y meneo de melena - "he sido yo".

La fotografía la hice este julio desde un barco en Cartagena, y lo que no ví a través de mi visor, lo descubrió más tarde al detalle la pantalla de 17" del ordenador:
"Te quiero mami". ¿Sería un bonito regalo para esta Navidad?

martes, 12 de diciembre de 2006

PORQUÉ GOOGLE NO ME ABURRE

YA LLEGÓ EL FRÍO

... y siempre el mismo lugar al salir del trabajo y nunca el mismo paisaje

lunes, 11 de diciembre de 2006

SÓLO PARA SABINIANOS O EX

Mi querido Joaquinito, que diría la Vargas, esta noche te cuento un cuento sin ripios, ni piratas cojos… que te duerma hasta el mes de abril, para que te des cuenta que nadie lo robo del calendario y que sigue esperando por ti.
Hoy mi Joaquín te contaré la historia de amor entre una niña que creció escuchando al hombre del traje gris en la parte de atrás de un 127, blanco y un cantautor andaluz, que el año que ella entró en el colegio, se perdía en los bares y cerraba la Mandrágora.
Entre rimas y guitarras eléctricas, la niña conoció a Cristina Onassis, hablaba del Mar de La Plata sin localizarlo en el mapa; por primera vez descubrió el significado del muro de Berlín, se divirtió cantando la historia de Juana la Loca que no comprendía (y que aún hoy es un himno gay) y pactó con caballeros una huída a Brasil en un Furgón con un tal “Dioni”.
Una canción, una historia: con presentación, nudo y desenlace que la tenían más entretenida que Falcon Crest. Y entonces creció y presumió de Boca en el Bulevar de los sueños rotos. Ahorró dinero, trabajó repartiendo publicidad, y cambió sus cintas casette por la colección de discos del cantautor de Úbeda que recopiló, poco a poco, gracias a las reediciones.
Durante años cada vez que subía al metro y se bajaba en Tirso de Molina, soñaba encontrar a su músico para decirle…, no sé para decirle algo, o simplemente en silencio dejarle marchar porque ¿qué le podía decir? Recordó entonces que la prensa le regaló una contraportada: una fan le pidió un autógrafo y éste le respondió con una copa en la cara.
Entonces llegaron los primeros amores y desamores de la protagonista de este cuento, y en cada canción encontró consuelo, y curó sus heridas en 19 días y 500 noches. Y la voz de su primer amor, que nunca se olvida, se fue quebrando, cada vez más rota, cada vez más sucia… y llegó la marichalada, la depresión, los miedos escénicos, y se enfrentó a la vida en la calle, y la discográfica editaba y reeditaba los discos con una extra más, ahora en acústico, ahora un making off, ahora un tema inédito…
Ya llovió desde aquel chaparrón hasta hoy, desde aquella decepción, desde la caída del mito. Hoy sigue comprando sus discos aunque el último lo haya escuchado tres veces:
1. Primera escucha
2. Segunda oportunidad
3. El próximo será mejor
Ojea sus libros, lee sus sonetos y se queda con ese Sabina que le enamoró siendo niña y que después de sus cuarenta y diez perdió “sexapil”.
Quizás siguiendo su ejemplo: la pasión por definición no puede durar y torpemente no sabe usar narcóticos contra el mal de amor o lo que es lo mismo Mentiras Piadosas.
Te dejo esta canción Joaquinito que tú te sabes tan bien... porque el amor es así:



sábado, 9 de diciembre de 2006

RENOVARSE O MORIR, ¿NO?

Esta tarde sin salir de casa y sin gastar un duro me siento de estreno: como si hubiese ido de compras y vistiese con traje nuevo. Y es que por fin y después de darle muchas vueltas, he dado el salto a la versión Betta del blog y me he animado a pasar por el quirófano.
Hoy estrenamos plantilla, señores (yo creo que más Faramar). Lo curioso es que el azul que va a ser el protagonista de la nueva plantilla, no es el color que más me gusta (como sabéis soy verde), pero ¿os imagináis el mar de otro color?
No tengo claro que éste sea el diseño definitivo pero me gusta mucho, aunque echo de menos la antigua cabecera. En momentos así, me siento impotente al no saber diseño de páginas Web, para traducir mi tormenta de ideas en una imagen coherente de en "enbuscadelmar".
En fin… espero que os sintáis como en casa y os guste el lavado de cara.
Un regalito: Kevin Johansen con su amigo Drexler (que ya ha presentado su hijo Pablo a la cantante de Marlango... parece que este amor va en serio): "no voy a ser yo".

A VECES LA NATURALEZA...

... es caprichosa

viernes, 8 de diciembre de 2006

EL ESPECIAL DE NAVIDAD II

Poner el Belén en mi casa es una tradición que se hereda, igual que se hereda la ropa de tu hermana mayor, los libros de texto de tu primo de Cuenca, el grupo sanguíneo o un piso en Torrevieja (esto último no lo digo por experiencia, ¿eh?). Poner el Belén, como decía, se hereda y como soy la hermana pequeña de tres, heredé hace 15 años esta "fantástica" tradición, que cargo con estoicismo sobre mis espaldas desde entonces.
Y ¡ojo!, que el Belén de mi familia, no es un Belén cualquiera: es el Belén de los "cabezones", más de 30 figuras de muchos colores, con grandes cabezas, que salieron de la tienda de mi abuelo Perico hace 40 años, y que poco a poco han ido creciendo gracias a nuevas figuras, no muchas, que encontramos, sólo a veces, en la Plaza Mayor de Madrid.
Todos los años ponía el Belén, y todos los años protestaba (hasta hace poco), sabiendo que una revolución y posterior huelga sólo conseguiría chantaje emocional, y una casa sobria y apagada por Navidad. Por eso hace tres años asumí que ir en contra de "tales" tradiciones familiares era una batalla perdida y cambié de actitud: "¡Hagamos de ese momento algo especial!"-pensé.
Por suerte mi casa siempre está llena de niños, sinónimo de jolgorio, gritos, risas, lloros, baberos, chupetes, y en definitiva alegría. Y este "detalle sin importancia", ayuda a que el ritual de poner el Belén sea algo más especial.
Hoy salí a la calle con Javier(4) y Lucía(2) a buscar piedras mágicas. Llenamos una bolsa entera de piedras, musgo, arena. Cogí papel alval para el río, harina para la nieve, serrín para el desierto... y fun-fun-fun... ¡Voilà! ¡ya tenemos el Nacimiento de este año!. Por supuesto, con los pelos como escarpias, disfrutamos de los últimos hits de estas Navidades mientras diseñábamos esta bonita estampa: "A Belén Pastores", "La Virgen se está peinando", o "25 de diciembre", números 1 en la lista de los Populares de AFIVE desde hace décadas.
Hoy durante dos horas volví a ser niña; me llené de barro los zapatos, manché mis manos de tierra cogiendo piedras y me mojó la lluvía. Hoy fuí de nuevo niña y escribí mi carta a SSMM Los Reyes Magos de Oriente, que como buenos magos espero sepan sortear todos los estados de emergencia de sus países de origen, y llegar a tiempo para concederme un único deseo, ¡Shhh!.
Juraría que las figuras eran más grandes otros años...

jueves, 7 de diciembre de 2006

EL ESPECIAL DE NAVIDAD

Con dos lagrimones en la cara recibía cada año la Navidad: echando siempre de menos a los que ya no estaban y olvidándose de los que, año tras año, se sentaban con él en "la mesa del 24 de diciembre". Y siempre silencios y siempre nostalgias...
Hasta hace unos años, pensaba que la Navidad era una época bonita, llena de colores, nieve, reencuentros, señores con barba blanca y sí, parodójicamente triste. Porque le miraba y su gesto era serio, apagado, melancólico...
A menudo yo decía tonterías para romper el hielo y alejarle de su luto navideño, sin embargo como payaso en la corte no tenía futuro, y él nada más acabar la cena de Nochebuena, se sentaba en su sofá para ver el "especial de Navidad" que echaban en la uno.
Entonces llegó Rubén hace 16 años, siete más tarde Sara, en el 2.002 aterrizó Javier, casi tres años tiene ya Lucía, y la próxima primavera cumplirá un año Santiago... Y sus nietos consiguieron lo que no pudieron sus hijos; hacerle sonreír en Navidad.

lunes, 4 de diciembre de 2006

EL MIEDO SEGÚN MICHAEL MOORE

EL MIEDO

En vista de que los lectores de “enbuscadelmar” son muy valientes, me encantaría que me infundierais ese valor del que a veces carezco.
¿A que tenéis miedo? Pregunto…, para luego elaborar con vuestros temores este post en el que pensaba transcribir una larga lista que fueran desde miedo “al hombre del saco” (que por lo visto era español y secuestraba y asesinaba niños), hasta la luz, el aire libre, los inmigrantes, la ruptura, el dolor o la muerte. Una infinita lista, dispar e irracional (porque así son los miedos), por la que no podemos juzgar a nadie.
Me paro y reflexiono ¿a qué tengo miedo? y me da vergüenza escribirlo. Quizás sea el pudor por lo que obtengo pocas respuestas cuando pregunto “¿a qué tienes miedo?”. Será que los temores son pudorosos y gritarlos denotan debilidad.
José Antonio Marina de profesión filósofo, ensayista y profesor de instituto, publica un nuevo ensayo “Anatomía sobre el miedo. Un tratado sobre la valentía”. Dice que el ser humano es la especie con más miedo por su condición privilegia. Vivimos entre el recuerdo y la imaginación. Recuerdo de lo vivido y anticipación de lo que viviremos, y es eso precisamente lo que nos hace estar siempre sumergidos en un estado de ansiedad, de temores y alerta.
No sólo tenemos miedo, sino que además nos paramos a reflexionar sobre él y al final, paradojas de la vida… acabamos teniendo miedo al miedo como comenta Txeche. “La perra” teme la muerte y Deni, con buen sentido del humor, teme por la integridad del cuadro de Munch. El miedo es libre.
Una vez dijiste que tenía siempre miedo a las cosas que luego afronto con normalidad. Quizás sea esa manía mía, que retrata Marina, de anticiparme a lo que acontecerá. Hablamos entonces de futuro y de lo que lo hace atractivo: la incertidumbre. Sí, la misma incertidumbre que nos provoca también estados de ansiedad cuando esperamos una llamada que no llega, un sí por respuesta o un aprobado.
Confieso, en voz bajita porque me da vergüenza, que tengo miedo a perder a la gente que quiero, las rupturas físicas o emocionales, o ambas cosa. En definitiva: al sufrimiento. Procuro no pensar mucho en ello, porque como dice el filósofo, acabamos teniendo miedo al miedo y finalmente me pregunto, ¿qué es el miedo?: una emoción que nos esclaviza y sobre la que no debería escribir para no pensar en ella. Habíamos quedado en eso ¿no?

viernes, 1 de diciembre de 2006

¿A QUÉ TIENES MIEDO?

MAREAS

LILANINE. Get yours at bighugelabs.com/flickr